Escribe el maestro Juliana en una columna muy madrileña (con elogio devuelto y todo):
Un frío de posguerra ha tomado los anocheceres y han vuelto los rumores. Los rumores tozudos, los rumores que perforan el cuadro existente. Crece la sensación de que un tiempo se acaba. De que los socialistas se la van a pegar.
El periodismo madrileño tiende a la tertulia y, perdón por el materialismo, la razón es económica. La tertulia es el género más barato: se coge a tres periodistas externos que pueden llegar con su propio medio de locomoción y se les hace hablar durante una hora. También es el género más barato intelectualmente junto con el de “queremos escuchar su opinión”. Los programas de radio que deberían dar información sólo tienen opiniones.
La tertulia madrileña tiende a la oposición (los socialistas se la van a pegar) por, perdón por el materialismo, una razón económica. El tertuliano/columnista tipo de la prensa madrileña es un periodista de unos 50 años que se ha hecho un cierto nombre, dispone de algunos contactos y mira con preocupación los constantes despidos en su empresa y con desprecio y odio a los nuevos dirigentes políticos que, a pesar de que los vio crecer, ya no se le ponen al teléfono.
Este tertuliano/columnista tiene muchas más posibilidades de sobrevivir si tiende a la oposición (los socialistas se la van a pegar) que si tiende a lo contrario (los socialistas no lo hacen tan mal); si es un periodista que piensa lo más probable es que acabe mal, por ejemplo, de corresponsal en Jerusalén.
Si uno tiende a la oposición (los socialistas se la van a pegar) puede tener una columnilla en El Mundo, ABC, La Razón, La Gaceta o El País, que busca la pluralidad y dar por el saco a ZP, el amigo de Mediapro. En radio, tenemos la Ser, Onda Cero, Cope, Onda Madrid, lo de Federico e Intereconomía y, en tv, TVE, Telecinco, Antena 3, Cuatro, Telemadrid y las digitales (de dedo) de Esperanza Aguirre: Veo7, Intereconomía, Popular TV o Libertad Digital TV. La mayoría no dan para hacerse rico pero 300 pavos nunca vienen mal: mica en mica s’omple la pica.
Si uno tiende a “los socialistas no lo hacen tan mal” puede escribir en Público o El País, que busca la pluralidad y recuperar el favor perdido, participar en la Ser u Onda Cero (poco) y, en TV, sólo las analógicas, quitando Telemadrid.
El problema de el tertuliano/columnista tipo de la prensa madrileña es que confunde la prensa madrileña con la prensa estatal. Las elecciones no se disputan en Madrid, donde él vive, trabaja y es (poco) escuchado, sino en 50 provincias más. El tertuliano/columnista tipo de la prensa madrileña no se da cuenta de que, a las 11 de la noche hay más gente sólo en Tuenti que escuchando la radio.